Buenas tardes,
No lo hicimos bien el domingo, y el resultado nos sitúa en una situación complicada. Empezamos el partido mal posicionados y nerviosos, con muchísimas imprecisiones que nos impedían sacar el balón en buenas condiciones. Nos duraba poco el balón, y el equipo rival se dio cuenta y nos presionó y encerró en nuestro campo. Pronto llegó el gol en un acción de córner mal defendido. A partir de ahí, el partido se fue nivelando y poco a poco fuimos teniendo más control del mismo, también porque ellos dieron un paso atrás. Pero todas nuestras acciones eran individuales, intentando progresar aún desde lejos muy lejos de portería. Perdíamos el balón constantemente (todos los choques eran suyos), , sin superar nunca con claridad las acciones de uno contra uno, ni conseguir ganar ninguna carrera en velocidad o crear superioridades. A trancas y barrancas, y con más corazón que cabeza, conseguimos disponer de varias ocasiones claras, que no llegamos a materializar, hasta el contraataque en la última jugada de la primera parte.
Pero si no estuvimos acertados en la primera parte, en la segunda fue peor. Y eso que no empezamos mal. En el descanso hablamos de juntar más a los volantes con Celso e insistir en la presión conjunta(hasta entonces individual y desordenada), procurando abrir más el juego por bandas hacia los extremos. Y parecía que la cosa empezaba a funcionar, cuando tras dos aproximaciones del Joy los nervios se apoderaron de la defensa, y poco después llegó el segundo gol en contra.
Junto con el chaparrón que empezó a caer, llegó el caos. Con los volantes retrasados para apoyar salida o ayudar en defensa, mandábamos constantemente balones largos hacia los tres jugadores de ataque, situados más allá de la mitad de campo contrario. Entre la línea de medio campo y los atacantes no había nadie, era un espacio vacío, y demasiados metros para progresar desde atrás y llegar en apoyo. Encima la superioridad era defensiva, 4 contra 3. Y en esas llegó el tercero, tras una falta donde hubo falta de atención y de comunicación. Jugadas así deben evitarse.
Otra vez tirando de carácter, conseguimos reducir distancias, pero ya no hubo más ocasiones.
Lo dicho, un mal partido y un peor resultado.